7 de marzo de 2017
"Fui un boludo".
Así, utilizando un término del lunfardo coloquial en una confesión a un
allegado, Cifuentes se definió a sí mismo a la hora en que tomó por un atajo
equivocado cuando su realidad económica ni siquiera requería de una actividad
paralela que lo terminó condenando tanto en la faz privada como pública. Con
esa expresión, Marcelo Cifuentes reconoció hace dos años haber tocado fondo
luego de que su nombre estallara en los círculos de poder y en la opinión
pública en general tras revelarse que había disparado una increíble suma de 364
cheques sin fondo. Cifuentes no hacía mucho tiempo había sido candidato a
intendente por el Justicialismo.
Lo cierto es que el desmadre acabó con el prestigio y la
dinámica de una escribanía histórica en la ciudad. Y Cifuentes intentó -y todavía
debe estar en eso- saldar lentamente la enorme deuda acumulada a través, se
conjetura, de una suerte de mesa de dinero informal que manejó paralelamente en
su propia escribanía. Si bien se conocía de altercados y algunos hechos violentos con clientes a quienes el notario les debía dinero, ahora el caso pasó al terreno de la Justicia. Parte del escándalo lo desató la denuncia por la que
Cifuentes fue citado a comparecer ante el fiscal Gustavo Morey, la que le inició
una mujer acusándolo de Defraudación con cheques y Retención indebida de
fondos. Cifuentes, cara a cara con el fiscal, se negó a declarar, aunque la
historia ya tiene más de dos años de ocurrida.
Fue Nancy Della Rocca quien en 2015 denunció a Marcelo
Cifuentes, en momentos que el ex candidato a intendente era Director de la
Jefatura Regional de Anses. Se lo acusó de defraudación con cheques y retención
indebida de fondos, luego de que Della Rocca asegurara que en 2012 vendió seis
departamentos, para luego ser estafada por Cifuentes. Denunció que el escribano
se había apropiado de trescientos mil dólares y también una suma en pesos,
luego de que ofreciera a que la mujer dejara el dinero depositado en la caja
fuerte de su escribanía. Cifuentes actuó como escribano en las operaciones de
venta de los departamentos.
Lo cierto es que el dinero nunca más apareció; a cambio
Cifuentes le entregó a la mujer cuatro cheques que fueron rechazados por el
banco. Al escribano le habían cerrado la cuenta por falta de fondos. Della Roca
solicitó se expida un embargo preventivo sobre un inmueble ubicado en la calle
Las Chilcas.
En el último tramo de esta historia, trascendió a través del
portal colega abchoy que Cifuentes se negó varias veces a presentarse ante la Justicia;
finalmente lo hizo, luego de ser intimido que sería llevado por la fuerza pública.
Trascendió que al momento de comparecer a la indagatoria, se negó a declarar.
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.
Solo suscriptos
Solo suscriptos
28 de abril de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
28 de abril de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
28 de abril de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
28 de abril de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
28 de abril de 2025