El comunicado de la entidad liguista, da cuenta que "luego de observar durante el último tiempo, el proceder erróneo de algunos allegados al fútbol infanto juvenil (por cierto son los menos), en la última reunión de Delegados se votó por unanimidad el siguiente protocolo que se aplicará a partir de este fin de semana".

Seguidamente, dan cuenta que "en caso que un espectador/a insulte vehementemente y reiteradamente a los jugadores (ya sean propios o del equipo rival) o a los árbitros, hasta se puede llegar a pedirle que se retire de la cancha".

Los árbitros, ante estas circunstancias, están facultados para actuar de la siguiente manera: 

Informará al entrenador del equipo cuyo simpatizante tenga ese proceder

De seguir los insultos, se parará el partido hasta que esta persona deje de insultar

De no abandonar dicha postura, se pedirá que se retire de la cancha al agresor.

Si este no lo hiciese, el árbitro Suspenderá el partido.

Con estas nuevas medidas se busca que cada partido comprendido entre las categorías 10ma. hasta la 5ta. transcurran en un clima de exclusiva competencia deportiva.

Entendiendo que el aliento es por demás aceptable y bien visto, se busca desterrar la "violencia verbal" de una vez y para siempre.