29 de octubre de 2021
por
Ana de Pietro - Facilitadora de Memoria Celular
Todos sabemos el único requisito para morir,
es estar vivo, entendiendo por muerte a la desaparición física, y para los que
creemos, la trascendencia del alma.
Hace pocos días me tocó despedir a una persona
muy querida de mi familia, mi tía Marta.
Curiosamente, además de la tristeza que me produjo su partida, sentí una
extraña sensación de que todo estaba en orden. No por su edad, ni porque se
fuera sin sufrimiento, sino porque cuando comenzamos a recordarla, me di cuenta
cómo había impactado en mí su forma de Vivir y que afortunadamente, habíamos
tenido un vínculo tan sincero, certero y claro que no nos quedaron pendientes. Lo
que me llevó a reflexionar si estamos preparados para partir o vivimos en una
constante negación de la única y obvia certeza que todos tenemos al nacer: y es
que Vamos a morir.
En su Libro "La muerte, un amanecer" Elisabet
Kubler Ross dice "La muerte es sólo un paso más hacia la forma de vida en otra
frecuencia" Y en él relata (les recomiendo ese libro) sus experiencias con numerosos
casos de estudio de personas que han traspasado por diversas causas, el umbral
de la muerte, y han regresado.
El punto es, generalmente, cuando alguien
amado acaba de partir, suceden dos cosas: primero el descreimiento el dolor y
la negación de que ya no lo volveremos a ver, y luego la valoración y el
recordatorio de numerosas anécdotas compartidas con quien fuera esa persona en
Vida.
Pero, ¿estamos realmente conscientes de la
transitoriedad de esta vida?, ¿Valoramos cada amanecer como una oportunidad?, ¿Llevamos
nuestro "balance" al día con cada persona que forma parte de nuestra
existencia?
Cuando somos muy jóvenes tendemos a creer que
tenemos mucho tiempo por delante, por lo que podemos "perdernos" en diversos
caminos, sin temor a que sea demasiado tarde, pero a medida que pasan los años,
vamos comprendiendo la finitud como una ineludible compañera. Pero cuál sería
el sentido de la Vida si no tuviera fin? Para muchos maestros y estudiosos del
tema, el fin último de nuestro paso por la Vida debería ser alcanzar al Amor
incondicional, entendido como la máxima evolución del alma, desprendida de todo
Ego y en absoluta libertad.
Pero, ¿Cómo podemos comprender la muerte de
personas jóvenes o niños?, ¿Cómo es posible aceptar la partida de las personas
que amamos? Definitivamente, aceptando que venimos a este mundo como si fuera
un viaje que hemos pactado y programado antes de realizarlo, para aprender lo
que necesitamos para evolucionar, y definitivamente, aquellos que parten a
temprana edad, es porque ya cumplieron con su paso evolutivo y han pasado a la
siguiente etapa, como quien vive un nuevo amanecer...
La muerte no es dolorosa, lo que nos duele es
el apego brutal a la presencia física. Y está bien ese dolor, está bien llorar,
enojarse y sentirse mal... Lo que no nos hace bien es eternizar el sufrimiento.
Lo que olvidamos, es Respetar el momento del que se fue, Respetar el proceso
sin ofrecer resistencia a lo inevitable. Continuando con la metáfora del viaje,
imagine que la persona que partió se siente feliz en su nueva vida, sin embargo
está viendo el dolor de los que quedaron, sus lágrimas, su tristeza y su
negación a dejarlo ir... No sería justo. Lo justo para el que se va, sería poder
marcharse en Paz mientras los que aún estamos aquí honramos su paso por esta
vida, rescatando lo que nos tocó compartir...
Estoy convencida de que así como tenemos libre
albedrío para vivir nuestra vida, también tenemos la posibilidad de transcender
este cuerpo y vibrar en otro plano cuando este camino termine. Ahora: como
queremos ser recordados? Qué marca queremos dejar en este mundo? Cuántos
corazones hemos tocado? Cuántas sonrisas hemos sembrado?
Querido Lector, le propongo un ejercicio:
Imagine que tiene unos pocos días para poner en orden su Vida antes de partir...
¿Seguirá discutiendo? ¿Seguirá perdiendo
tiempo con enojos? ¿Seguirá resistiendo o finalmente se decidirá a decir los
"Te Amo" que tiene pendientes, los "Gracias" que debe, los "Te quiero" que
alegran corazones y se pondrá a sembrar recuerdos amorosos con los que
comparten su camino? Seguirá son lo que viene cargando o soltará lo que no es esencial?...
El tiempo es un concepto de este mundo, pero
sigue corriendo... Le deseo de corazón que lo aproveche cada día, para que cuando
llegue el momento, podamos disfrutar
livianos y en Paz de un Nuevo Amanecer.
Ana De Pietro - Facilitadora de Memoria Celular
Contacto:
WhatsApp: 249 4557618
Email: anadepietro@hotmail.com
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.
DE PIE Y VIBRANDO
DE PIE Y VIBRANDO
DE PIE Y VIBRANDO
DE PIE Y VIBRANDO
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de enero de 2025