En primera instancia, recordó el cruce con el intendente Lunghi, el año pasado, cuando la ciudad se apartó del sistema de fases impuesto por la provincia. "Con Lunghi está todo muy bien, tengo una obligación institucional con los 135 intendentes de la Provincia. Tuvimos una charla en algún momento cuando amagó con soltarse con el sistema de fases, que es general y admite críticas, pero no cortarse solo. Le hemos mandado fondos a Tandil, asistencia sanitaria y todo lo que corresponde. Tuvimos un cruce y lo aclaramos"

"Las restricciones siempre hinchan, generan angustia, fastidio. Pero tenemos expertos que nos recomiendan esas medidas. Hoy viendo los números, le quiero agradecer a los vecinos de Tandil por el esfuerzo que hicieron y que rindieron frutos. Bajaron los casos, por ende los muertos, y ese es el objetivo", sumó el gobernador. 

Por otro lado, se refirió a la situación del turismo y la gastronomía, de los sectores más afectados por la pandemia y que tienen un papel importante en la economía tandilense: "Las políticas de Macri y Vidal tuvieron tres años muy difíciles. Cuando cambió el gobierno en la provincia, tuvimos un verano muy bueno en 2019, se facilitó el acceso al crédito y otras medidas, llegó la pandemia. Algunos sectores se vieron muy perjudicados, el Estado estableció unas medidas, insuficientes posiblemente, pero veníamos de años muy malos producto de los descalabros financieros".

En ese sentido destacó que "en el durante, todavía estamos implementando y anunciando medidas, como el perdón impositivo, mejoras en el crédito, fondos específicos para el turismo y la gastronomía".