"Estábamos autorizados para tomar medidas más restrictivas, tuvimos un miércoles y jueves con camas de UTI totalmente cubiertas y una gran internación en sala general. Indudablemente tenemos que bajar la circulación porque se desmadra todo en segundos. Hay que buscar bajar la curva, seguir vacunando y que la gente comprenda que no tenemos otra forma de seguir adelante. Veremos si en quince días podemos frenar los contagios y volver a la actividad hasta las 23 horas", comenzó el jefe comunal.

"Después de las 18 quedan farmacias de turno y delivery, nada más. Hay que frenar la curva porque no tenemos camas", sentenció Lunghi, quien pidió además que después de dicho horario "todos se movilicen para volver a su casa"

Indicó que esta decisión se consensuó con la Provincia, quienes "quedaron conformes" y continuarán el monitoreo de la situación hora a hora.

El intendente expresó que "la ciudadanía es muy buena y creo que lo va a cumplir. La gente de Tandil se va a comportar bien y vamos a salir de esta tragedia" 

Por último, se refirió a la continuidad de las clases presenciales: "De las 2600 burbujas han tenido inconvenientes 30, no es algo significativo. Yo recorro las escuelas, veo muy prolijo los ingresos, las aulas perfectamente, todos con barbijo, bien separados"

"Lógicamente puede pasar que vayan varias personas cuando llevan o van a buscar a los chicos, también en el transporte. No creo que pase mucho acá, si en el AMBA. No veo que las escuelas sean un gran foco de infección", cerró el jefe comunal.