EL CHACARERO
28/11/2018
A pesar de que las semillas del cultivo poseen potentes defensas químicas, la chinche verde logra alimentarse de ellas. Revelan que los microorganismos de su tracto intestinal le brindan esta capacidad que la convierte en una de las principales plagas de la oleaginosa.
por
El Chacarero
La chinche verde (Nezara viridula) es
originaria del norte de África, pero ataca al cultivo de soja en todo el mundo.
A pesar de que esta planta oleaginosa tiene fuertes defensas químicas contra la
herbivoría, capaces de indigestar a un mamífero de 400 kilos, las chinches se
alimentan de sus granos en desarrollo y reducen la calidad y el rendimiento del
cultivo. En este contexto, investigadores de la UBA estudiaron el tracto
intestinal del insecto y encontraron microorganismos que le brindan esa
particular resistencia y lo convierten en una de las principales plagas del
cultivo.
"Entre las defensas químicas de la soja contra
los herbívoros hay dos compuestos particulares -llamados isoflavonoides e inhibidores
de proteasas- que afectan negativamente el crecimiento de los insectos y hasta
les producen mortandad. Por eso estudiamos los mecanismos que le permiten a la
chinche verde alimentarse sin problemas de los granos, y nos enfocamos en el
microbioma de sus intestinos", explicó Virginia Medina, docente de la cátedra
de Bioquímica de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA).
En este sentido, agregó: "Gracias al avance
tecnológico podemos mirar de forma minuciosa el microbioma intestinal de los
insectos. Hoy tenemos la posibilidad de conocer qué organismos lo componen y
estudiar cómo actúan. En el 40% de las chiches que analizamos, encontramos tres
géneros de bacterias -Enterococcus, Yokenella y Pantoea-y creemos que son las
responsables de ayudar a las chinches verdes a detoxificar y desactivar de la
protección química de la soja. De hecho, en el estudio que publicamos en la
revista científica Plos One específicamente observamos que Yokenella desactiva
los inhibidores de proteasas de la soja".
"Hoy en día se aplican grandes cantidades de
insecticidas para tratar este problema. Se dice que N. viridula produce un daño
silencioso porque uno recién se da cuenta del ataque al momento de la cosecha.
Si determinamos el conjunto de bacterias que le permite a la chinche
alimentarse de las semillas de soja, podemos pensar en controles más amigables
con el ambiente. Quizás podemos evitar que se adapten a esas defensas", comentó
Jorge Zavala, investigador de la cátedra de Bioquímica de la FAUBA.
¿De
dónde vienen las bacterias?
"Aproximadamente, el 40% de las chiches tenían
bacterias en sus intestinos medios. Algunos géneros de microorganismos
aparecían en casos específicos, pero los tres que mencionamos estaban siempre
presentes dentro de ese 40%. Por eso, nos enfocamos en ese grupo y buscamos de
dónde provenían", señaló Medina.
Y añadió: "Realizamos ensayos en cautiverio y
encontramos que entre un 20 y 25% de las chinches más jóvenes, en su primer
estadio ninfal, presentaban estas bacterias. Aparentemente, algunas lo traen de
nacimiento y luego se van contagiando entre insectos, porque sus primeros
estados de desarrollo los pasan muy juntos. Podría estar sucediendo una
transferencia horizontal. En estadios más desarrollados, pueden obtener las
bacterias desde la soja o de otros elementos del ambiente".
Revelar
el silencio
Zavala, quien también es integrante del
Instituto de Investigaciones en Biociencias Agrícolas y Ambientales (INBA,
UBA-Conicet) resaltó que la plaga reduce el poder germinativo de las semillas,
sus propiedades nutritivas y el rendimiento de la soja en diferentes regiones
templadas del mundo. "El grupo de investigación está estudiando el impacto que
tiene la agricultura sobre la presencia y la diversidad de estas bacterias en
el intestino de la chiche".
Además, Medina destacó que dentro del equipo
de investigación existe un grupo de personas que estudia las chinches verdes y
otro equipo que estudia cómo reacciona la soja a los ataques de insectos
herbívoros. "Los insectos y las plantas evolucionaron de forma conjunta con sus
mecanismos de defensa y es fundamental tener en cuenta los múltiples factores
que intervienen en esta interacción. Sobre este aspecto profundizaremos en
futuras".
Autor:
Sebastián M. Tamashiro
Fuente:
FAUBA
Envia tu comentario
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento sera eliminado e inhabilitado para volver a comentar. Enviar un comentario implica la aceptacion del Reglamento
2008 - 2024 © www.eldiariodetandil.com | Todos los derechos reservados