"Mi viejo trabajaba en una cadena de hoteles. Cuando llegó de Francia se instaló en Haedo y al poco tiempo  consiguió este empleo. Por su trabajo lo enviaban a distintos puntos del pais. Estuvo en Mar del Plata y también en Tandil, que es cuando la conoce a mi madre. Despues de mi nacimiento, ya se quedan instalados en la ciudad y pusieron lo que hoy sería un polirrubro, en Pinto al 800. Justo enfrente a donde vivíamos. De ahí recuerdo que estaba la empresa de transporte El Rápido y que sus micros salían desde allí", le contó a ElDiarioDeTandil.

"Mi vieja siempre fue docente, fue maestra en escuelas rurales de Tres Arroyos, fue maestra en la escuela de adultos que funcionaba en lo que es la Escuela N° 2, a la noche. Llegó a ser directora de esa escuela de adultos y es el día de hoy que muchas personas la recuerdan. Me paran por la calle y me hablan bien de ella. Tambien me pasa con mi viejo. Así que eso es algo que va quedando infinitamente y uno intenta transmitirselo a los hijos. Tuve una educación muy buena. Tuve una infancia linda y tranquila. Era hijo único. Querido, no solamente por mis viejos. Mi vieja tenía dos hermanas que me amaban, la mayor era mi tia Nélida, que me trataba como un hijo. Y es el día de hoy, con mas de 60 años, que sigo recordando aquellos pasteles de papa que me hacía, porque sabía que me gustaban mucho. Jugábamos a las cartas también, son recuerdos muy lindos que uno guarda", respondió.

"Fui criado por el ala francesa de mi viejo y española de mi vieja, de apellido Rodriguez Gatti. Desde muy chico me marcaron a fuego los preceptos de la revolución francesa. Y también algo que hoy llamarían progresismo, y yo se lo tengo que agradecer a mi viejo. Que a las personas había que valorarlas, primero, por como se comportan con vos. Mi viejo, ya en esa época, los '70, me decía 'vos no tenés que mirar a la gente por su condición económica, por su condición sexual o religiosa'. El tipo sería un avanzado hoy". Habla de su padre y se emociona. Le hubiera encantado que él pueda conocer a sus nietos. Son esas pérdidas que nos acompañan por el resto de la vida. Solo queda aceptarlas y seguir adelante.

Quique hizo el primario en la Escuela N°2 y el secundario en la Escuela de Comercio, donde se recibió de perito mercantil, algo muy alejado de lo que son sus intereses y lo que hizo durante toda su vida. "Pese a eso, tengo un gran recuerdo de esa época. Vivimos momentos muy buenos, con un montón de compañeros que fueron mis amigos. Con quienes hasta el día de hoy seguimos teniendo contacto. Con algunos, los que estamos en Tandil, nos cruzamos de vez en cuando y con los que estan afuera la seguimos por las redes sociales. Cuando estaba en el secundario se comienzan a hacer eventos para recaudar dinero para el viaje de egresados. En cuarto año se nos ocurrió hacer un desfile de modas, aprovechando que teníamos una compañera, cuya hermana era una reconocida modelo. Asi nos fuimos contactando con otras modelos y con la casa de modas, que en ese momento era muy conocida: Etam. Hoy ya no existe. Recuerdo que Ester Gáspari era la gerenta. Cuando estaba todo listo, se dan cuenta que faltaba el presentador. Contactan a maestros de ceremonia y locutores, pero no teníamos guita para pagar eso. Asi que ahí dije yo lo hago, porque yo ya estaba encaminado, me gustaba y esa fue mi primera locución", dijo sobre su debút como locutor y presentador.

Desde jóven, Lagoutte tuvo inclinación por el periodismo. Frente a su casa estaba el taller de Chenlo, muy conocido en aquella época y en donde paraba Juan Galvez cuando venía a Tandil.  Galvez era un ídolo del automovilismo por aquel entonces. Los pibes del barrio se acercaban al taller para que el piloto los lleve a dar una vuelta en el auto de competencia. "Esa cercanía con Galvez me permitió hacer mi primera entrevista. La hice después de un asadito, con un grabador de la época, que la cinta te duraba 8 o 10 minutos. Me lo había regalado mi viejo, porque ya le había comentado mi intención de ser periodista y locutor. Despues creo que el primer entrevistado oficial, que hice para un medio, fue Graciano "el gringo" Pintore, que en aquel momento era una de las estrellas del deporte local. Había peleado para la televisión y era un boxeador rankeado entre los primeros de la Argentina, cuando un campoeonato valía mucho en aquella época. Nunca me voy a olvidar de eso", recordó.

Despues le tocó el Servicio Militar Obligatorio y supuso un paráte en su trayectoria. Pero a la salida de la colimba recibió la esperada propuesta para trabajar en Radio Tandil.

"Yo estaba empezando a ser un poco conocido, por los eventos y presentaciones. Entonces me llaman para hacer una prueba en Radio Tandil, porque necesitaban un locutor. Era aquella Radio Tandil de Cacho González, por ejemplo. Yo estoy sumamente agradecido a esa oportunidad que me dieron, Cacho me dedicó mucho de su tiempo para que yo aprenda los secretos de este oficio.  Él, después, con los años, me decía que había visto un potencial enorme, un diamante en bruto que había que pulir. Mas adelante tuve la suerte de ir a Buenos Aires para estudiar locución en el ISER", indicó sobre sus comienzos en la radio madre.

Su voz en la radio mas importante de la zona le acercó mas oportunidades. A la vez que continuaba como maestro de ceremonia en desfiles de moda, tambien empezó a presentar boxeo y a desempeñarse como "la voz del Estadio General San Martin".

"La verdad que no me puedo quejar, siempre he tenido mucho trabajo. En televisión fui locutor de cabina en Argentina Televisora Color (ATC). En la televisión local tuve un programa que se llamaba "El expreso", que también iba para Canal 8 de Mar del Plata. El pibe Techeyro era el conductor y yo co-conductor.  Era un muy programa que producía Daniel Estradé, alguien que hay que mencionar cuando se habla de la televisión en Tandil. Ese programa despues me abrió otras puertas y aparece Cerrovisión. Recuerdo que le hacíamos entrevistas a los politicos y empresarios, pero antes teníamos que explicarle que iban a salir en el Cable. Era todo muy nuevo. Era una situación, un momento de romper estructuras. También trabajé en Canal 8 de Mar del Plata en Para todos, que conducía Orlando Marconi con Marquesini, Pérez Bastida y yo que era como un corresponsal acá en Tandil, llevando actores, cantantes y participando en el programa. Ahí nos enseñó mucho Héctor Toto Maselli, creador de La Tuerca y de Los Benvenuto por ejemplo. Después aparece en la televisión, Simplemente familia, programa en vivo que hacíamos con María Esther Lacovara, los sábados de 20.30 a 22 horas. Todavía hay gente que recuerda 'el corte del salame', o 'cuántas monodosis hay'. Una etapa bárbara. Pero todo tiene un fin. Se vendió Cerrovisión y los nuevos empresarios nos dejaron de lado", dijo sobre su paso por la TV.

Luego aparece la posibilidad de sumarse a la producción internacional de Miss América Latina, donde fue maestro de ceremonias por mucho tiempo. "Ahí aprendí muchísimo, fueron 9 o 10 años yendo a trabajar con un gran equipo de trabajo que tenía su centro de operaciones en Miami. Ahí tuve la posibilidad de conocer muchos países de américa, como Perú, Costa Rica, El Salvador, México, la República Dominicana y otros más", casi sin quererlo, Quique se encontró trabajando en un mega proyecto, al lado de figuras renombradas de todo el continente.

Para el 2001 nace Artículo 14. El programa político de mas larga trayectoria en la ciudad. "Fue en pleno lío del 2001, con el corralito y los conflictos que todos recuerdan. En todos estos años pasé por varias FM, AM y hasta en la televisión", contó sobre el programa que hoy se emite todas las mañanas por Radio Tandil en horario central. En los años 70, mientras estudiaba en Capital, Quique trabajó en el Congreso de la Nación, lo que despertó cierto interés en la política que todavia mantiene a fuego.

Su fama en relación al mundo de la moda lo acercó a la conduccion de grandes eventos en la Capital Federal y en el interior del país. A traves de "Belleza Cientifica" logro trabar grandes relaciones con empresas relacionadas a la estética y la peluquería.

"Últimamente volví a la locución de deportes, que había hecho hace muchos años y me encanta. Lo mismo que la vuelta a Radio Tandil. Para mi es como volver a la época en que estaba con Ricardo González, con Coco Guimet en la dirección artística, el Suncho Hernández como operador y tantos compañeros que uno recuerda de aquel momento. Fue muy fuerte volver a ese lugar, al principio fue como un impacto entrar de nuevo a la emisora y recordar tantas anécdotas y amigos que ya no están. Me acuerdo una muy buena historia que vivimos en años del Proceso Militar. A la mañana temprano se leía la lista de fallecidos y todo el mundo estaba pendiente. Resulta que un gracioso llamó a la radio y pasó una lista falsa, con la muerte de un vecino muy reconocido de Maria Ignacia, Vela. No te puedo explicar el revuelo que se armó. Un escándalo tremendo. Al rato tuvimos que sacar en vivo al falso muerto, para llevar tranquilidad a los vecinos y frenar con esa ola. Eso pinta lo que es Radio Tandil. Su alcance y su llegada", ponderó.

Su vuelta a la radio madre es un premio a la trayectoria y permanencia. Todavía sigue con la misma fuerza que cuando empezó allá lejos y hace tiempo. "Soy un enamorado de esto y pienso seguir hasta que tenga cuerda. Hoy, a veces, me acompaña mi nieto. Me pide que lo lleve a la radio y no me puedo negar. Disfruto mucho de mi trabajo. No es una época fácil en los medios. Se han provocado muchos movimientos tremendos, en los medios nacionales y locales. Y para mí poder estar hoy en Radio Tandil y nada menos que de 11 a 13, un horario central, es una gran alegría", finalizó.